Las macros: un recurso clave para mejorar la productividad del corrector
Ricardo de Pablo desveló las bondades de las macros como herramienta para automatizar procesos mecánicos y, de este modo, optimizar el trabajo
Ricardo de Pablo, corrector de textos y docente de Estilo URV, impartió los pasados meses de octubre y noviembre un seminario sobre macros organizado por UniCo, la Unión de Correctores. A pesar de que son un recurso de gran utilidad, que nos puede ahorrar horas de trabajo, lo cierto es que las macros siguen siendo un terreno poco explorado por muchos profesionales de la corrección.
De manera resumida, las macros son una secuencia automática de acciones mecánicas. Así, cuando trabajamos con Word, podemos programar una macro que, por ejemplo, elimine las tildes del solo, arregle los dobles espacios y evite los puntos dentro de las comillas. De este modo, con un solo clic o mediante una combinación de teclas preestablecida, podemos pedir al programa que ejecute todas esas acciones al instante.
Antes de emplearlas, debemos instalarlas en Word: podemos grabar y ejecutar nosotros mismos las acciones, o bien escribirlas mediante código. Asimismo, existe la posibilidad de copiar una macro de internet en nuestro sistema. Un ejemplo de macro que se puede encontrar en internet es el quitamanchas del Dr. Macro, que soluciona más de cien errores básicos.
En Estilo URV tenemos la suerte de contar con un profesional como Ricardo de Pablo, que instruye a nuestros alumnos en el uso avanzado de Word y les desvela estos y otros trucos. Como correctores, debemos dominar en profundidad nuestras herramientas de trabajo. Del mismo modo que un cuchillo afilado le ahorra tiempo a un cocinero, un conocimiento exhaustivo de las posibilidades que Word nos ofrece redunda decisivamente en nuestra productividad.